La prolongación del acuerdo PSOE-BNG en el Concello de Ourense dejará al bipartito al frente del Gobierno municipal otra legislatura. Se han producido cambios en el reparto de los 27 escaños que conforman la Corporación Municipal este 22 de mayo, pero a la hora de la verdad la correlación de fuerzas es la misma: 14-13.
Lo que los nacionalistas perdieron en las urnas los socialistas han conseguido recuperarlo, mientras que los populares a duras penas mantienen ser el partido más votado y todo hace indicar que, sino todos, buena parte de los 4.519 votos conseguidos por Democracia Ourensana tienen mucho que ver con los 4.596 que le costaron al Partido Popular esos dos escaños perdidos.

Todo lo ocurrido se sustenta en el siguiente baile de números: los nacionalistas de Isabel Pérez perdieron este 22-M el 50%, la mitad, del crédito conseguido en 2007. En justa proporción, pasan de 6 a 3 concelleiros, que seguirán siendo los tres que ya lo fueron en la anterior legislatura.
Los nacionalistas bajan de los 12.253 votos a los 6.146. Una caída importante, que hace el doble de las elecciones de 2007, cuando ya el BNG había bajado de 15.165 votos a 12.253.

Sin embargo, como queda dicho, los escaños que el BNG pierde los rescata el PSOE, que sube 4.468 votos y pasa de los 16.428 en 2007 a los 20.896 ahora. Experimenta un crecimiento de voto del 27%, lo que le sitúa exactamente a 669 de superar al PP y ser la fuerza más votada en la capital ourensana.

Los populares pierden voto, 4.596 con respecto a 2007, y se sitúan en 21.564 frente a los 26.160 que hace cuatro años le habían dejado ya a las puertas de la mayoría absoluta ya Poly Novoa de la alcaldía.