La ruptura de acuerdos entre fuerzas rivales del Partido Popular en los comicios del pasado 24 de mayo, podría elevar a 65 las alcaldías del PP en esta provincia llegada la jornada de constitución de las nuevas corporaciones locales de este sábado y toma de posesión de los nuevos alcaldes. Que serían 66 si, resuelto el contencioso planteado en Lobios, el gobierno y la alcaldía es para el PP y María del Carmen Yáñez, respectivamente.

La ruptura de negociaciones en unos casos y acuerdos en otros posibilitan a los populares las alcaldías de Piñor de Cea, Punxín, Ramirás y Viana do Bolo, además de la de la capital ourensana. En todas ellas no ha habido mayoría absoluta en las elecciones del pasado 24-M. En tales casos habrá que aguardar a este sábado para constatar, finalmente, el desenlace de la situación de gobiernos y alcaldías para el mandato que ahora comienza.

Es seguro que los populares perderán 3 alcaldías de otros tantos concellos fuertes de esta provincia, los de Verín, O Carballiño y Barbadás, donde no ha habido mayoría absoluta pero sí hay acuerdo en dos casos (Verín y Barbadás) para gobernar por la izquierda, mientras en O Carballiño gobernarán en minoría los socialistas como la fuerza más votada.
Tampoco gobernará el PP San Xoán de Río, cuyo gobierno pasa al PSOE, Baños de Molgas y Sandiás, donde gobernarán los independientes de Agrelsán en minoría (al menos de entrada). Los populares perdieron la mayoría absoluta en 9 concellos de la provincia que tenían hasta el pasado 24 de mayo, en los que sólo en 3 (Punxín era socialista) podrían gobernar si este sábado se materializa el desacuerdo entre las restantes fuerzas.

El Concello de A Rúa se suma a la pérdida de alcaldías populares, una vez que el PP no consiguió la mayoría absoluta (lo mismo que en 2011) pero si que esta vez hay acuerdo entre socialistas y nacionalistas para gobernar. Tampoco tendrá el gobierno de Vilamartín de Valdeorras, donde ahora el PSOE sí ha conseguido mayoría absoluta que sitúa a los socialistas en el gobierno al margen de operaciones políticas como la que el pasado mando le dio la alcaldía a María Jesusa Candal Jarrín.

El PP sólo tiene Xinzo y puede lograr la capital, pero pierde Verín y O Carballiño y no consigue O Barco y Ribadavia

El manifiesto optimismo del presidente de los populares ourensanos, Manuel Baltar, en relación a los resultados del pasado 24 de mayo en la provincia ourensana, sólo puede ser relativo si se tiene en cuenta que, por mayoría absolutas logradas, los populares sólo tendrán este sábado 60 alcaldías (pendiente como está la de Lobios). Con sus 509 concelleiros electos y el 43,94% de respaldo en las urnas, no es menos cierto también que el PP perdió con respecto a 2011 en la provincia ourensana más de 20.000 votos, un 20% (1 papeleta de cada 5), medio punto porcentual menos que el Partido Socialista.

Sin embargo, el Partido Popular ha perdido alcaldías tan importantes como las de 2 de las 4 principales villas de la provincia, Verín y O Carballiño, no ha sido capaz de ganar las de O Barco de Valdeorras y Ribadavia y mantiene Xinzo de Limia pero pierde también Barbadás.
Los populares han ganado 5 alcaldías con mayorías absolutas que no consiguieron en 2011, las de Os Blancos, A Bola, Cortegada, Lobeira y Maceda. Pero sólo las dos últimas fueron realmente en las urnas, porque las otras 3 ya las había ganado su presidente provincial, Manuel Baltar, ganando para el PP a sus repectivos alcaldes y los aparatos de gobierno independiente (Os Blancos), nacionalista (A Bola) y socialista (Cortegada). De algún modo ya estaban ganadas antes de las elecciones, como así ocurrió el 24-M.