Casi la mitad de la plantilla, 57 de los 128 trabajadores fijos de la empresa Mecanizados Rodríguez Fernández, MRF, ubicada en el Polígono de Pereiro de Aguiar de este concello, se encuentran afectados por un Expediente de Regulación de Empleo, ERE, que podría resolverse en un mes con el despido de estos trabajadores, según denunciaron este miércoles los sindicatos CIG y UGT.
El ERE de esta empresa sigue a dos suspensiones temporales de actividad solicitadas y autorizadas a la empresa, según pusieron de manifiesto los representantes sindicales.
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Según Etelvino Blanco, de la CIG, ahora mismo el proceso se halla en "fase de consulta", y se pevé que los despidos se materialicen en no más de un mes.
La empresa alega causas económicas y de productividad, razones que CIG y UGT ponen en duda dado que, señalaron Etelvino Blanco y Javier Carreira, "a empresa dispoía dunha situación financieira moi solvente fai apenas seis meses, e incluso se poñía como modélica e punteira no seu sector".
Para el secretario de la CIG, "despois das dúa suspensións de actividade que os traballadores acaban de sofrir, pensamos que se trata de unha saída traumática que non procede".
Dada la situación, la CIG advirtió de la posibilidad de un cierre total de la factoría del Polígono de Pereiro de Aguiar, una opción que la central nacionalista no descarta. Sin embargo aquí la UGT especula con otra posibilidad, la de que MRF esté buscando a través de un ERE deshacerse de la plantilla de trabajadores fijos "dun modo barato", señaló Carreira.
Una empresa con filiales en Portugal y Brasil
En todo momento, las organizaciones sindicales incidieron en la solvencia que presentaba hace pocos meses la situación económico-financiera de esta empresa, que correspondía con el optimismo y tranquilidad en el que se movían sus responsables.
De hecho, el pasado 27 de noviembre MRF recibió de manos del conselleiro de Innvoación e Industrai de la Xunta, Fernando Blanco, el diploma que acreditaba a esta empresa como finalista del Premio Applus a la Excelencia Empresarial.
La empresa destaca en su web que "MRF quedó situada entre las seis primeras auditadas de las 65 que se presentaron", y se recalca que "este es el primer año que MRF se presentaba al premio", para concluir que "pocas empresas premiadas en dos años anteriores han logrado acceder a la categoría de Finalista al primer intento".
La empresa nació en 1966 en Os Peares como una empresa familiar dedicada a la fabricación de componentes para autocares. Seis años después, amplió su gama de productos a la fabricación de cierres para camiones, y se trasladó al Concello de Coles. En 1984 fundó una filial, MRP, en Vila de Conde, localidad próxima a Porto, Portugal, y en 1998 constituyó su filial comercial para sudamérica, Mecanizados Rodríguez do Brasil, en este país.
Fue en 1999 cuando decidió ubicarse en las instalaciones que actualmente ocupa, en el por entonces todavía incipiente Polígono de Pereiro de Aguiar.
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