Ante la proximidad del cierre de otro mandato en la administración local, la Federación de Vecinos Limiar de Ourense emite balance de lo que califica como "Dez anos de queixas", que resumen, según Limiar, una década de incumplimientos. Diez años, recuerda Limiar, es lo que los vecinos de Ourense llevan esperando por la puesta en servicio del Transporte Metropolitano. A este respecto recuerda que son diez años lo que lleva reclamando tanto al Concello de Ourense como a la Xunta de Galicia la puesta en marcha de este servicio: "estamos cansos de ver cada 6 meses promesas de datas concretas que non se cumpren", señala la Federación vecinal.

Sin embargo, en el caso de la capital ourensana hay más asuntos de importante calado que duermen una especie de sueño de los justos: "O Plan de Urbanismo dorme nos caixóns o sono eterno", el Plan Termal continúa con reuniones "pero non se desenvolve", los barrios siguen con las calles deterioradas esperando que comience alguna obra y la Policía Local "continúa facendo caso omiso e esperan as solucions nas paradas de autobuses, cruces, curvas, cans en xardíns e toda clase de irregularidades".

Señala Limiar que las asociaciones vecinales de Ourense están "fartas" de entregar escritos que nunca se atiende. Junto a esto, "os nosos concelleiros continúan perdendo o tempo en temas estériles e que non interesan a ninguén". De ahí que "Ourense merece outra clase de representantes" y no los que hacen que "os plenos parecen un circo".
El frente vecinal advierte que, metidos ya en precampaña, "todo son promesas", y afirma que las reuniones que ya proliferan las consideran "unha perda de tempo". "Non somos unha moeda de cambio", concluye señalando la Asociación Vecinal Limiar.